¿Practicas Aikido?

A raíz de los últimos artículos sobre la práctica dura, honesta y vigorosa de Aikido como los de Henry Ellis, 6 Dan y pionero del Aikido británico, Minoru Mochizuki, 10 Dan Meijin y designado en cierta ocasión para suceder a Morihei Ueshiba, y otros estamos recibiendo críticas con comentarios como «me da miedo lo que destila este artículo» o «no han comprendido el espíritu del Aikido».
Yo solamente soy un practicante, pero en lo personal lo que me da miedo es que la gente que hace este tipo de comentarios, los que se dan por aludidos, crea que están más capacitados que los más arriba mencionados para definir lo que es y lo que no es el Aikido, su espíritu o el mensaje del Fundador.

Morihei Ueshiba O Sensei, Fundador del Aikido, practicando con Kiai en sus últimos años.
Los arriba mencionados, y otros muchos, son practicantes, estudiantes y Maestros que o han vivido con O Sensei siendo sus verdaderos uchideshi, o han sido uchideshi de sus alumnos más aventajados, o han sido pioneros en Europa o Estados Unidos. Mientras que los que se dan por aludidos raramente han visto a O Sensei, a sus verdaderos uchideshi o a sus alumnos más veteranos y aventajados.
Poner en tela de juicio la práctica de Kazuo Chiba, Tadashi Abe o Kenshiro Abbe, por poner tan solo un ejemplo referido al último artículo al respecto es en mi humilde opinión bastante atrevido.
Escudarse en el supuesto y mal entendido pacifismo de Ueshiba sirve muchas veces para apartar la responsabilidad de una práctica seria y, sobre todo, honesta. «No es pacifista quien quiere sino quien puede», como resume Takamura Yukiyoshi anterior soke de la Takamura Ha Shindo Yoshin Ryu.
En cualquier modo creo que hay un problema doble aquí: por un lado la gente que lleva poco tiempo y que por razones de respeto se deja guiar ciegamente por su maestro. Para estos estudiantes lo que dice su maestro es la verdad absoluta y por lo tanto están en posición de dudar de lo que hacían los pioneros del Aikido. Por otro lado están los practicantes que llevan demasiado tiempo como para cambiar el enfoque de su práctica. Estos dos grupos de aikidokas deben criticar los métodos de los discípulos de O Sensei. No tienen otra salida, es una cuestión de supervivencia. Es comprensible. Sin embargo yo tendría dificultades en criticar el Aikido de Shioda, Tomiki, Shirata, Saito, Hisa… escudándome en que éstos no habían entendido el significado, el mensaje. Entiendo que yo debería aceptar que ellos sí que vivieron y entrenaron con Ueshiba y que por tanto sabían más de lo que yo sabré en toda mi vida de práctica, aceptaría que ellos están en lo cierto y que yo, y mi maestro antes que yo, estamos equivocados. Es no proceder así lo que a mí me da miedo.
Cuidar de uke
Por supuesto. Hay que cuidar a uke. Una práctica dura, seria y honesta no se caracteriza por la intención de lesionar a nuestros compañeros de práctica. Una práctica honesta simplemente nos pone en la posición en la que uke no nos puede alcanzar durante la ejecución de la técnica y, sin embargo, nosotros sí somos capaces de meter un atemi. No dejamos suki, aperturas, por donde uke pueda escapar o golpearnos. Una práctica honesta no consiste en aplicar kotegaeshi hasta luxar la muñeca de nuestro compañero, o shihonage hasta la dislocación de su codo. Consiste en estar en la posición de hacer todas estas cosas, sin tener que hacerlas.
Una práctica seria y rigurosa nos hace ver los fallos en el ataque de uke, obligándole a mejorarlos, así como los fallos en la técnica de tori. Si uke ataca incorrectamente simplemente se encontrará con un atemi. No hay necesidad de completar ninguna técnica. Kazuo Chiba es famoso por «despertar» a los uke que le atacan sin cuidado. Bien es cierto que mucha gente le califica de «brutal» por esta práctica. Creo que, sin embargo, más brutal sería no corregir un ataque mal ejecutado de modo que sea un enfrentamiento «real» quien corrija a nuestro uke… quizá demasiado tarde.
Igualmente si tori ejecuta de manera deficiente, no marcial o descuidada, la técnica entonces debe ser uke quien tenga la obligación de «despertar» a tori. De igual manera, no proceder así nos lleva inevitablemente a una mala ejecución, a la presentación de aperturas, que en una situación fuera del dojo puede ser muy peligrosa.
El Aiki no siempre es bonito
Las técnicas deben ser precisas, rápidas, contundentes y expeditivas al mismo tiempo que deben preservar la integridad, primero de tori, y luego si fuera posible, de uke. Así es como yo lo veo y como, a la vista de los documentos históricos, lo veían el Fundador y sus discípulos.
Precisas porque un error en la ejecución puede dar lugar a que nuestro oponente escape o que aproveche una apertura para contrarrestar nuestra técnica. No tener cuidado, no prestar atención o simplemente no darle importancia a los pequeños detalles hacen que la técnica no sea eficaz. En un entorno altamente colaborativo una técnica así funcionará sin problemas. En un entrenamiento honesto, o fuera del dojo, no.
Rápidas porque entretenerse en dar vueltas, marear a nuestro compañero, agacharle para luego levantarle y volverle a llevar al suelo, bailar a su alrededor o hacer que él baile al nuestro no es sino darle tiempo para recomponerse, reformar su estructura y rehacer el ataque o escapar. Mientras menos tiempo lleve completar una técnica más posibilidades de éxito tendremos. Katsu hayabi (勝早日), victoria inmediata.
Contundentes para que uke no se vuelva a levantar del suelo, idealmente no por estar gravemente lesionado, sino porque no le queden ganas de seguir recibiendo. No me malinterpreten, no hay que estampar a uke contra el suelo, dejarle sin resuello o partirle un brazo. Al fin y al cabo es nuestro aite, nuestro compañero. Pero hay que entrenar como si esa fuera nuestra intención, de manera intensa, sin acabar de culminar la luxación o lanzar a nuestro uke de cabeza contra el suelo.
Expeditivas, porque uke no está siempre solo. Raramente lo está. Aquellos que practican randori tienen esto claro, hay que quitarse a un uke de encima porque enseguida viene otro. Mentira, no es que venga otro, es que hay que ir a por otro sin darle tiempo a que él venga a por nosotros y nos ataque como él prefiera y le convenga. Tenemos que forzar su ataque a nuestro gusto, sensen no sen (先々の戦), yamabiko no michi (山彦の道).
Tori debe, ante todo, preservar su propia integridad física y la de los que les rodean. Esto creo que es una obviedad, y es que el principio primero y último es de la defensa, la propia y la de los demás. Si no se cumple con esto no estamos practicando Aikido ni ningún otro arte marcial o Budo. Si podemos asegurar este punto entonces es cuando debemos intentar preservar la integridad de nuestros oponentes. Shinbu Fusatsu (真武不殺), el verdadero Budo no mata.
Cuando se practica así, el Aiki no siempre es bonito. Raramente lo es.
El espíritu de victoria
El aikidoka debe desear prevalecer. No tener este deseo impedirá que seamos capaz de preservar nuestra propia integridad y, por tanto, la de quienes nos rodean. Si anteponemos el bienestar de nuestro oponente sobre el nuestro seremos derrotados. Y tras nosotros aquellos a los que intentáramos proteger. Sin este deseo de victoria no prevaleceremos.
Basta ver a un veterano maestro proyectar sin esfuerzo a un principiante sin espíritu de victoria. Las cosas cambian mucho cuando el principiante tiene intención de prevalecer. En ese caso el experimentado maestro deberá afinar su técnica y su distancia para poder anular el ataque del principiante. El espíritu de victoria del principiante puede ser, muy a menudo lo es, capaz de hacer que el ataque de éste sea efectivo y que su maestro fracase en su tarea de defenderse. Solamente el espíritu de victoria del maestro puede hacer que éste prevalezca. Solamente el espíritu de victoria del maestro hará que su técnica quede correctamente afinada, que no presente ninguna apertura, y que sea capaz de, debido a su superioridad técnica, diluir el ataque en la nada. O contra el suelo. Masakatsu agatsu (正勝吾勝), la verdadera victoria es por uno mismo. No puede existir victoria por uno mismo si no se toma el control de los pequeños detalles que hacen que las técnicas de Aikido funcionen.
Si tori no presenta espíritu de victoria, no toma control sobre sí mismo primero y sobre la situación y sobre uke después, uke debe contrarrestar la técnica obligando a tori a despertar de su letargo. O buscar otro dojo.
El Aikido no funciona
En ocasiones se oye a maestros decir que «el Aikido no funciona». Yo no entiendo que un maestro diga semejante cosa. En cualquier caso, si por su experiencia propia realmente cree que lo que hace no funciona, debería decir «lo que yo enseño en mi dojo no funciona», lo que inevitablemente significaría lo mismo que «yo no hago Aikido». ¿Cómo es posible que un arte marcial no funcione? ¿Que un Budo no sea efectivo, eficaz y eficiente? O bien el Aikido no es Budo, o bien quien dice estas palabras no esté practicando Aikido.
Los escritos de Ueshiba no dejan lugar a dudas de que el Aikido es un arte marcial y que trata de la defensa propia y de los demás. Su escrito «Budo» de 1938, la colección de fotografías del Fundador en el afamado Noma Dojo en 1936, el manual «Budo Renshu» profusamente ilustrado por Takako Kunigoshi en 1934, «Aikido Densho» de Kanemoto Sunadomaru, su biógrafo personal… todos ilustran un efectivo método de autodefensa, un Budo de pies a cabeza creado por Morihei Ueshiba O Sensei.
Los métodos Budo Yoseikan, creado Minoru Mochizuki, Shodokan puesto a punto por Kenji Tomiki y Hideo Oba, Yoshinkan de Gozo Shioda codificado por sus alumnos y enseñado al cuerpo de antidisturbios en Japón, Iwama Ryu estructurado por Morihiro Saito, el trabajo de Rinjiro Shirata, uno de los pocos que estudiaron con O Sensei antes y después de la guerra… ¿Realmente se puede decir con conocimiento de causa que no sirven para defenderse? El Aikido de Tadashi Abe, quien resignara del Aikikai alegando que lo que había visto en el Hombu Dojo de Tokyo era un «Aikido para señoritas», el de Kazuo Chiba, Hiroshi Isoyama, Kenshiro Abbe, ¿realmente no sirven como medio de autodefensa? ¿El del mismísimo Steven Seagal no sirve?
No pretendo nombrar a todos los que son, pero creo que son ejemplos suficientes de que el Aikido sí funciona. Lo que no funciona es el Aikido de algunos maestros, más dados a las exhibiciones que al renshu sincero.
Duro antes que suave
Los primeros discípulos del Fundador eran ya expertos en otras artes antes de comenzar su estudio del Aikido. No era necesario enseñarles a luchar, a proyectar, a luxar, a inmovilizar o a golpear sin presentar asimismo aperturas que sus adversarios pudieran aprovechar. Ya sabían todo esto. ¿Qué buscaban entonces de Ueshiba si con lo que sabían ya tenían más que suficiente?
A menudo se oye, muy a menudo, demasiado a menudo, que en el Aikido no se golpea, que no hay atemi, que no hay kiai. Que el Fundador no enseñaba estas cosas. Estoy seguro de que esto es falso. Hay una buena cantidad de material, fotos y vídeos, donde Ueshiba emplea atemi, kiai, armas, ¡incluso un rifle equipado con bayoneta! contra sus oponentes. Está el testimonio de Abe cuando cuenta que Mochizuki le propinó una buena patada insistiendo en que esto era también Aikido.
Quizá O Sensei no tenía la necesidad de enseñar todo esto porque sus alumnos ya lo sabían. Ya eran expertos en Judo, Jujutsu, Kenjutsu, Kendo, Sumo cuando se unieron a él. Con mucha seguridad, total seguridad, estos discípulos aventajaban a O Sensei en estas artes. ¿Por qué se convirtieron en sus estudiantes? Creo que buscaban lo único que hacía que Ueshiba pudiera impresionarles: su Aiki.
Recientemente hemos recibido también comentarios en la línea de que «Ueshiba no dominaba realmente el Aiki de Takeda», o de que «no hay evidencia de Aiki en los vídeos de Ueshiba». También se lee que «no existe aikiage en Aikido». Es difícil juzgar el Aiki a través de un vídeo, mucho menos a través de unas fotografías o incluso de unos dibujos. Es imposible. El Aiki es algo que «debe ser sentido». Yo no estaba allí, pero todos estos expertos budokas sí. Ellos estuvieron allí y vieron algo que les hizo convertirse en discípulos de Ueshiba. ¿Expertos budokas buscando un ejercicio más o menos aeróbico sin pies ni cabeza ni capacidad combativa real? Lo dudo. Sí es posible que Ueshiba no fuera el alumno más aventajado de Takeda. No lo sé, quizá Kodo Horikawa llegó más alto de Ueshiba en el arte que ambos recibieron de su maestro. Al menos eso es lo que dicen los alumnos de aquel. En cualquier caso no se trata de si Ueshiba era el que tenía «más aiki o menos aiki» de los alumnos de Takeda, sino de que tenía «algo» que hizo que estos artistas marciales se convirtieran en sus seguidores.
En cualquier caso, sin esa experiencia previa, la misma que Takeda exigía a quienes pretendían estudiar con él, no hubieran sido admitidos como estudiantes del Fundador. El Aiki por sí mismo no otorga capacidad alguna de autodefensa al Aikidoka. La capacidad de defensa es algo que se debe llevar puesto de casa. O de otro arte. ¡Ahá, luego el Aikido no funciona! Bueno, en última instancia lo que funciona o no funciona es el practicante, no el arte. Si durante la práctica cuidamos todos los detalles que Ueshiba no tenía que enseñar al darse por supuestos, si aprendemos a no dejar aperturas, si desarrollamos el espíritu de victoria, si nos entrenamos en cómo colocar el cuerpo, gestionar el maai y el deai, si buscamos los atemi, el suki en nuestro uke y en nosotros mismos, si entrenamos con honestidad, nuestro Aikido sí funcionará. Debemos aprender a ser duros para poder ser suaves o, volviendo a Takamura, aprender a hacer daño para no tener que hacerlo. Si vis pacem para bellum, si quieres la paz prepárate para la guerra.
Es bueno empezar a escuchar voces en este sentido y no la misma canción de siempre según la cual solo «verdadero Aikido» es el que apunta a practicas suaves, danzadas y lejos de lo que es Marcial o inclusive sin comprender la realidad de la violencia actual.
Saludos desde Uruguay,
Osu!!
Carlos Silva
3er Dan Shuseikan Aikido
Aikido Shojin Dojo
Combat Aikido
http://www.aikidoshojindojo.com
Muchas gracias por tu comentario. Tenéis un gran linaje en vuestro estilo, una genial armonía entre Tohei, Shioda y Chiba. Un cordial saludo.
Supongo que los practicantes de silat tienen cierta ventaja: el «seni» y el «bela diri» van de la mano. Luego cada cual podría interesarme más en un aspecto, pero sin dejar de lado el otro (y mucho menos abandonarlo).
Pero total, los rouco barelAikis no se bajarán del burro ni aunque el viejo en persona resucitara y les diera dos sopapos en japonés (que total, seguro que lo hablan perfectamente para «entender el mensaje/comprender el espíritu/ blablabla», incluso mejor que el montón de alumnos «directos» que confesaban que ueshiba se pegaba la clase soltando una verborrea espiritual que nadie pillaba).
Que luego les queda muy fina la chupapollez de «soy humilde porque ‘no compito'», o quieren vivir de las rentas de los logros de otros.
Ya lo decían en un libro de Conan-La torre del elefante-, y es sencillo cambiar unos términos por otros, que la frase sigue siendo igual de válida: «Civiliced men are more discourteous than savages because they know they can be impolite without having their skulls split.»
Gracias Pankratos. Me quedo con la cita de Conan. Un saludo.
Lo que molesta no es esto, sino el desprecio absoluto que destilan vuestros artículos hacia otras formas de entender la práctica, el artículo de Ellis es paradigmático al respecto, como el que continuamente esteis criticando al Aikikai lo que no creo que sea vuestra labor. Os gusta más una manera de entender la práctica, pero eso no debería ser motivo para estar siempre criticando una organización concreta o determinadas maneras de practicar. En los comentarios a varios de los artículos me he quejado al respecto, y os lo digo abiertamente, no respetais otras prácticas, y se nota claramente. ¿Quereis ser un sitio de referencia? Comenzad por respetar. Sería interesante encontrar un sólo artículo en esta página en donde el Aikikai salga bien parado o analizado con una mínima seriedad.
Estimado maestro, está Vd. equivocado. En el Aikikai hay y ha habido grandes maestros de referencia. Shoji Nisio, Yoshio Kuroiwa, Yutaka Kurita, Rinjiro Shirata…
Entre nuestras labores está la difundir el Aikido de O Sensei, no criticar al Aikikai, lo que por otro lado haremos cada vez que por ejemplo, como grandes figuras y maestros de la institución dicen abiertamente, los grados se den no por calidad técnica sino por tiempo de práctica.
Siempre criticaremos cuando alguien no haga Aikido pero disfrace su práctica con ese nombre. Flaco favor la haríamos a la memoria del Fundador si no lo hiciéramos.
Respetamos otros tipos de práctica siempre que se trate de Aikido como lo que es, un Budo. Esperemos que no sea Vd. quien desprecie este tipo de práctica.
Muchas gracias por seguirnos. Un cordial saludo.
Su respuesta lo retrata: Ni Tissier (mostrado mucho en esta página) ni Kissomaru (vilipendiado en esta página) ni Yasuno, ni Yamaguchi (retratado en algunas imágenes y no demasiado bien parado), ni Osawa, ni muchos otros grandes referentes del aikido mundial,
En se sección de «Quienes somos» no se refleja nada de lo que ha dicho usted aqui, Es bueno que se vayan quitándo las máscaras.
Por cierto, sea o no maestro no me he venido a presentar como tal. Suena un poco sarcástico.
¿Quién es Vd. para criticar nuestras preferencias mientras no permite que nosotros critiquemos las suyas? Esa actitud no corresponde con el espíritu del Aikido que Vd. practica. Es una posición muy hipócrita.
Mis queridos amigos; los veo confrontando entre ustedes – en vez de armonizar; las polemicas fueron, son y seran motivo de puntos de vista y de practica; no todos podemos practicar de la misma forma y mucho menos explicar los motivos; mas blando, mas duro, son solo formas distintas de practica, no deja de ser AIKIDO, ahora lo que si no es AIKIDO, es la confrontación …. por favor, todos aman este Arte, como yo… intentemos armonizar mas …
en lo personal, he tenido el honor de practicar con Kurata sensei y Yamada sensei (solo por nombrar dos polos muy opuestos de un mismo aikido), y para ser presiso he aprendido y sigo aprendiendo de ambos…
Los estilos … es mas política y económica que técnica o filosofica, paso y pasa en todas las Artes Marciales …
mas me quedo con el mensaje claro de Osensei, de armonizar ya desde la no confrontacion … un abrazo…
Gracias Carlos, sabias palabras. Un saludo.
Supongo que Alejandro no tiene ninguna máscara que quitarse, ya que siempre ha dicho lo que piensa, y teniendo en cuenta que es coeditor de Aikido en Línea, seguirá diciéndolo. Otra cosa es que guste o no, que se esté o no de acuerdo, pero sus críticas, en cualquier caso, son meramente «técnicas», y no personales. Las comparte con el resto de aikidokas a través de este blog, igual que mucho de su enciclopédico conocimiento sobre las artes marciales japonesas. Obviamente, cualquiera es libre de leerlas o no.
Lo que también me gustaría aclarar, como coeditor que soy, es que independientemente de los comentarios personales que podamos hacer como practicantes de artes marciales (de Aikido u otras disciplinas), aquí estamos haciendo un esfuerzo diario por traer material histórico, técnico y filosófico de primer nivel sobre el tema, y tratando de introducir temas y reflexiones que no es fácil encontrar en nuestra lengua, y que pueden abrir interesantes puertas a la práctica y el conocimiento del Aikido (yo mismo me paso buena parte de las noches traduciendo de varias lenguas al castellano).
En esta tarea buscamos la variedad, así podrá encontrar una entrevista a Watanabe Sensei, una a Homma que critica duramente a este shihan (entre otros), y otra a Yamada, junto con la carta de renuncia de Tohei, por poner varios ejemplos. La historia del Aikido es la que es, y no queremos ocultarla detrás de ningún relato oficial.
Por último, en Aikido en Línea estamos abiertos a todo tipo de colaboraciones, como indicamos en la web. Si cualquiera se siente ofendido, o considera que lo que decimos no es cierto, total o parcialmente, no tiene más que expresarlo (sólo faltaría), con respeto (nada de insultos o de muestras de prepotencia, eso es motivo de rechazo del comentario/post. Ya se ha hecho alguna vez, de hecho), y cómo considere conveniente. Y a partir de eso, pues se puede debatir, hasta cierto punto, ya que hay aspectos que sólo se pueden dirimir en un tatami, probando las técnicas.
Por eso, considero que su crítica es un poco exagerada. Si le hemos ofendido personalmente (algo que se me escapa), lo sentimos. Pero si sólo está en desacuerdo con nosotros, pues nos parece bien, y lo respetamos profundamente. Un saludo y gracias.
Discrepo rotundamente, vuestras críticas no son técnicas. Por ejemplo, el análisis de una técnica en distintas escuelas que haceis, al aikikai lo despachasteis en una línea para decir que estaba mal, sin mayor explicación. En otras, como por ejemplo la de Shiho nage, que el Aikikai lo hacia mal (sin analizar que hace o deja de hacer el aikikai). Os he visto hasta llegar al ridículo con un corte de periódico en donde el doshu Moriteru expresa que su padre varió las técnicas de O´sensei, sin aportar debate ni información. La página esta continuamente lanzando la idea de que el Aikikai no tiene ni idea, y que el único aikido válido viene de las otras líneas. En algunas ocasionas, como en «la técnica asombrosa» hasta me tome la molestia de buscar ejemplos similares que fueron despreciados, ni siquiera tenidos en cuenta.
En definitiva, es una lástima que una iniciativa que parecía interesante se haya convertido en una lavandería. Tal vez eso es lo que más me apena.
Es vuestra página, vosotros a lo vuestro, pero necesitaba expresar mi descontento y desconcierto.
Sin más, tampoco tiene sentido que ande yo por aqui, es vuestra linea editorial el difamar a unos. No pasa nada.
Y sin embargo Vd. se permite difamarnos. ¿Llegar al ridículo con el anuncio de Moriteru? ¿Dice Vd. que Moriteru miente? Eso sí sería difamación. Sobre la técnica «asombrosa» lamento comunicarle que sus ejemplos son poco asombrosos y no tienen nada que ver con la técnica en cuestión. En cualquier caso no ocurre nada. Si Vd. considera que esta página no tiene cabida en su concepción de lo que es y no es el Aikido es bien libre de ignorarnos. Es una lástima pero es su libertad. No pasa nada si un maestro como Vd. cree tener más razón que el Fundador y sus alumnos más cercanos. Estamos gracias a Dios en un país libre. No pasa nada.
A ver, eterna discusión.
Practicar aikido como arte de movimiento.. ¿es correcto? sí. ¿es legítimo? si ¿es rama del árbol ueshiba? si ¿desarrolla cualidades físicas y sicológicas marciales? no ¿favorece la autodefensa? no ¿es maravilloso arte en movimiento? si. ¿es la verdad absoluta del aikido? no
Practicar aikido como arte marcial ¿es correcto? si ¿es legítimo? si ¿es rama del arbol ueshiba? si ¿desarrolla cualidades físicas y sicologicas marciales? si ¿favorece la autodefensa? si ¿es la verdad absoluta del aikido? no
Así, que cada uno clarifique que aikido hace y que objetivos se consiguen con esa práctica.
Y por favor, no tomar como falta de respeto lo que es divergencia de opiniones, que aikido no es una religión, ni una iglesia, ni una secta.
Hola Marco. En realidad no es ninguna discusión sino que pongo voz a lo que afortunadamente cada vez más practicantes opinan. Por supuesto, y como tú bien apuntas, no es la verdad absoluta. Sería demasiado pretencioso pretender tenerla.
En todo caso lo que sí creo que es pretencioso es tachar la práctica de los pioneros del Aikido con comentarios de «me da miedo lo que destila este artículo, ¿habéis visto sus vídeos?». Es pretencioso por lo que apuntas, da una visión muy miope y alejada de la práctica de O Sensei.
No pasa nada por practicar así, pero en toda honestidad cambia el nombre a lo que haces. Otros lo hicieron. Masamichi Noro me viene a la cabeza cuando renombró su práctica como Kinomichi. O Daniel Lazennec, Monto de Paco, al llamar a lo que él enseña Aidoi. O el método Aikicontrol de Santos Nalda. Todas ellas prácticas muy respetables.
Si yo hiciera Aikido, o Kinomichi, o cualquier otra cosa y dijera que lo que estoy haciendo es, digamos, Hontai Takagi Yoshin Ryu, ¿quién piensa que no ocurriría nada? ¿Tendría yo el derecho a alegar que simplemente es mi método de Yoshin Ryu y que nadie tiene la verdad absoluta respecto a esta escuela por lo que mi práctica es respetable? Seguramente mi práctica fuera respetable, pero no lo sería tanto que dijera que practico una escuela cuando no es cierto.
Amigo Alejandro es que esta cuestión es muy subjetiva. ¿que queda dentro de los parámetros básicos para ser considerado aikido? Pues depeden de de lo que uno considera que es aikido y del concepto que se tiene de budo/arte marcial. Aikido es un arte marcial. arte y marcial. ¿en que proporción? Para mi 50% de cada. Para otros es 10-90 o 90-10. ¿quienes tenemos derecho a usar la palabra aikido legitimamente? ¿que alumno de o’sensei es el transmisor más legítimo de su aikido? ¿el que menos ha cambiado las tecnicas aprendidas de el? ¿es que el aikido tiene que ser el unico arte marcial inmutable del mundo marcial y solo saito morihiro lo representa?. Creo que la cuestión es muy discutible y por eso está muy discutida. Es lo más normal que del árbol ueshiba broten legítimamente ramas diferentes… lo que no quita que ramas de otros árboles o totalmente desgajadas se llamen también aikido. Es lo que hay.
Me gustaría que quedara claro que no creo que Saito sea el único transmisor legítimo. Lamento que esa sea la impresión que transmito.
Por otro lado creo que tomamos la palabra «arte» con un sentido que no es. De la RAE:
arte.
(Del lat. ars, artis, y este calco delgr. τέχνη).
1. amb. Virtud, disposición y habilidad para hacer algo.
2. amb. Manifestación de la actividad humana mediante la cual se expresa una visión personal y desinteresada que interpreta lo real o imaginado con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros.
3. amb. Conjunto de preceptos y reglas necesarios para hacer bien algo.
4. amb. Maña, astucia.
5. amb. Disposición personal de alguien. Buen, mal arte
6. amb. Instrumento que sirve para pescar. U. m. en pl.
7. amb. rur. Man. noria (‖máquina para subir agua).
8. amb. desus. Libro que contiene los preceptos de la gramática latina.
9. amb. pl. Lógica, física y metafísica.
Creo que las aplicables son las 1, 3 y 4. Dicho esto, el Aikido no es 50/50 arte y marcial, sino que es 100% arte y 100% marcial.
Si se me permite hacer un pequeño comentario o más bien corrección a este artículo tan interentante, el Aikido Yoshinkan no fue codificado por los alumnos de Shioda sino que de hecho fue el propio Shioda el primero en estructurar un programa de todas las enseñanzas técnicas recibidas de O Sensei. Lo que sí que hicieron los alumnos de Shioda y más concretamente Kyoichi Inoue (segundo Kancho del Yoshinkan) fue estructurar los movimientos básicos o Kihon Dosa, tan característicos de este estilo y que se practican tanto al principio como al final de la clase independientemente de los grados. Segun parece, era tal la afluencia de alumnos que tenían en los cursos que Kyoichi Inoue tuvo que idear esta forma de entrenamiento a modo de katas para poder controlar a tanta gente. A Shioda le gustó la idea y al final lo adoptaron como una forma de entrenamiento del Yoshinkan, pero lo que es un programa de técnicas, este fue confeccionado por el propio Shioda.
Exceptuando esta salvedad, estoy totalmente de acuerdo con el artículo y os felicito por esta página tan interesante cuyos artículos son verdaderas joyas para cualquier estudiante de Aikido.
Saludos
Muchas gracias Roberto por la corrección. Efectivamente el método codificado por sus alumnos (como bien apuntas principalmente Inoue Kancho) es el de Kihon Dosa. Muchas gracias por los ánimos; realmente es un esfuerzo grande, ingrato las menos de las veces, pero que creo merece la pena para poner las cosas en perspectiva para la comunidad hispanohablante. Un cordial saludo.
hola no soy practicante todavía, pero me parece muy valido el análisis,
y demás de interesante, el aikido me parece un arte marcial eficaz como,
defensa y de auto control, sin dejar de evolucionar en el conocimiento adquirido,
reciban un cordial saludo.
Sensei Miyazawa, quien introdujo el Aikido en Argentin,a decia que había tantos Aikido’s como gente lo practicaba
Hola:
Quizás sea meterme donde no me llaman, ya que nunca he practicado aikido, pero me gustaría compartir una experiencia personal de otro arte marcial que viene al hilo de este tema.
Durante unos años practiqué sumo en una universidad japonesa. Alguna que otra vez, sobre todo al final del entrenamiento, en días previos a las vacaciones, etc. ocurría que dos miembros jóvenes del club luchaban no muy en serio, entre risas o haciendo alguna gansada. Los senpais siempre les regañaban muy en serio, diciéndoles que casi todas las lesiones durante el entrenamiento se producían en ese tipo de situaciones, que cuanto más en serio lucharas, más difícil era que te lesionaras. Y, por mi experiencia, sé que tenían razón. Las veces que casi me rompí la nariz o me quedé con un codo dolorido durante bastantes días fue en ese tipo de combates medio de cachondeo medio en serio.