Entrevista con Kazuo Chiba

A continuación os traemos una entrevista a Kazuo Chiba, realizada por Arthur Lockyear para el número 70 de la revista Fighting Arts International, y que nos parece de interés a la hora de conocer mejor a este maestro, recientemente fallecido. En ella Chiba nos explica su trayectoria marcial, su encuentro con O Sensei, y su salida de Japón para enseñar Aikido en Inglaterra y Estados Unidos.
Sensei ¿cómo llegaste al estudio del Aikido?
Bueno, yo estaba muy interesado en las artes marciales desde pequeño, y decidí desde el principio entrenar en serio en al menos una de ellas. Comencé con judo y estuve cuatro años. Luego me pasé al Karate.
Entrenaba en la sede del Shotokan creo: ¿cómo era el entrenamiento?
Oh, realmente me encantaba, había un espíritu muy recio durante el entrenamiento, muy satisfactorio, me gustó mucho. Nakayama Sensei fue el principal instructor pero pude ver al Maestro Funakoshi Gichin en varias ocasiones. Me uní a la Asociación Japonesa de Karate alrededor de un año antes de que el Maestro Funakoshi muriese. Recuerdo que hubo una gran ceremonia para conmemorar su fallecimiento.
¿Coincidió con alguno de los maestros actuales del karate?
Sí: Nishiyama Sensei, Okazaki Sensei y Sensei Kanazawa. Kanazawa Sensei era primer Kyu por entonces, o quizá primer Dan, no estoy seguro. Asano Sensei era tercer Kyu y Kase Sensei andaba por allí también.
¿Hay algo en particular que le hiciese pasarse al Aikido?
Bien. Cuando era primera Kyu (el nivel justo por debajo de Cinturón Negro) en Judo fui a un torneo y sucedió que me tocó luchar contra mi sempai del dojo – un segundo Dan, creo. Le derroté, y entonces se me acercó y me dijo: ‘Has aprendido todas las formas de mi Judo, pero todavía tengo el Kendo». Me retó. Así que nos fuimos afuera. Me dio un bokken (espada de madera) y tomó un shinai de Kendo. Fui incapaz de tocarlo, ¡ni una sola vez! Me golpeó con fuerza y estaba negro y azul por las contusiones. Después de esto pensé profundamente sobre el significado de Budo. Yo quería un arte marcial que fuese eficaz en cualquier situación, ya fuese que el oponente tuviesea un arma o no. Así que, finalmente, decidí que iba a convertirme en un estudiante del Maestro Ueshiba, fundador del Aikido. Fui directamente al Hombu pero no tenía carta de presentación, que era un requisito necesario entonces. Llegué al Hombu y solicité una audiencia con O Sensei. Me dijeron que él no estaba allí, y que debía desaparecer. Estaba tan concentrado en ser estudiante de O Sensei que decidí esperar a su regreso. Así que me senté en el jardín del dojo y esperé. Al final del tercer día O Sensei regresó, y le dijeron que había un chico loco fuera que quería verlo. Bien, O Sensei les dijo que me llevasen ante él. Me llevaron fuera de su habitación y dijeron que esperase. Cuando se abrió la puerta, estaba el Maestro Ueshiba. Nuestros ojos se encontraron por primera vez: ¡es un momento que nunca olvidaré! Yo no sabía qué hacer, así que me incliné tan profundamente como pude. O Sensei me dijo: ‘Las artes marciales son muy duras, ¿podrás soportarlo? Afirmé inmediatamente: «Sí Sensei». Así que así es como llegué a ser aceptado como un uchideshi con el Maestro Ueshiba.
¿Empezaste en ese momento el entrenamiento en Aikido?
No, no se me permitió practicar inmediatamente. Tuve que limpiar el dojo y todas las otras habitaciones en el Hombu, además de lavar, hacer la limpieza, comprar, realizar tareas de administración y cuidar a toda la familia del Maestro. También tuve que trabajar en los campos. Con el tiempo se me permitió ver primero las clases y luego, después de algún tiempo, entrenar. Nadie me enseñó, tuve que aprender por mí mismo. Afortunadamente yo ya podía hacer ukemi, así que todo fue bien. Me decidí a darlo todo para ser un buen uchideshi de O Sensei, y aprender todo lo que pudiese de él. ¡Fue el mejor momento de mi vida! Recuerdo que O Sensei siempre tenía una fuerte presencia. Había un ambiente muy especial cuando él estaba cerca. Esto venía de su postura física, la forma en que estaba sentado, su forma de caminar, la forma en que se movía que era tan hermosa… . Nunca pude ver ninguna abertura en la postura de O Sensei, nunca. Sus ojos eran casi dorados, no negros como es habitual en los japoneses.
Su estancia como uchideshi debió haber sido rigurosa.
En cierto sentido, era como un campo de batalla. Nos levantábamos todos los días muy temprano para el trabajo y el entrenamiento, y muchas noches había que quedarse hasta tarde para esperar a Waka Sensei (el hijo de O Sensei, Kisshomaru, el segundo Doshu) que volvía de su trabajo de oficina. Era tan fuerte e intenso que muchas veces estuve a punto de un colapso nervioso. Yo solía ver cosas extrañas: todas las noches un fantasma solía venir a visitarme. No sé si se suponía que era un hombre o una mujer. En ese momento no me di cuenta de lo cerca que estaba del colapso, pero ahora me doy cuenta, por supuesto. Justo antes de que me quedase dormido cada noche aparecía, era realmente aterrador. Podía sentir su presencia. Entonces, de repente, se transformaba en algo parecido a una tonelada de peso encima de mí y yo no era capaz de moverme. Finalmente encontré una solución. Llevé mi bokken a la cama conmigo y tan pronto como sentía su presencia sostenía el bokken fuertemente, y entonces todo iba bien. Esto se debió al agotamiento creo.

Chiba Kazuo, como uchideschi de O Sensei
Hace muchos años me habló acerca de su primera reunión con Tamura Sensei, ¿podría repetirlo por favor para los lectores?
Bueno, fue un día después de clase y algunos de los estudiantes estaban haciendo randori de Judo randori en el tatami. Yo estaba de pie en el pasillo observando y uno de ellos me invitó a participar, cosa que hice. Me sorprendió lo débiles que eran, y proyecté varias veces un hombre que era Sandan (tercero grado de Cinturón Negro), tanto en Judo como en Aikido. Así que el maestro, Tamura Sensei, me llamó y me invitó a practicar con él. Entonces ‘bang’, Tamura Sensei me golpeó duro en el vientre. Yo aprendí mucho de eso, fue una buena lección de conciencia, de la distancia y la postura para mí. Creo que Tamura Sensei es uno de los grandes estudiantes de O Sensei. Aprendí mucho de él en el pasado.
¿Alguna otra persona de la que le gustaría hablar, quizás Saito Sensei?
Sí, él es un gran maestro. Cada vez que visita los Estados Unidos, le invito a enseñar en mi dojo. Saito Sensei era un discípulo especial de O Sensei. Se quedó después de la guerra para hacerse cargo de él y administrar la granja en el Iwama Dojo. He visto el tipo de responsabilidad que llevaba, y nadie podría haberlo hecho tan bien como Saito Sensei. Realmente aprecio el trabajo de Saito Sensei.
¿Qué pasa con Doshu, el sucesor de O Sensei?
El profesor responsable directo de mi formación era Kisshomaru Ueshiba Sensei. O Sensei ya se había retirado a la ladera de la montaña de Iwama, y sólo iba al Hombu Dojo de vez en cuando. El crecimiento y desarrollo del Aikido moderno desde la guerra ha sido debido a la ardua labor de Doshu. Su Aikido es muy hermoso.
¿Qué hay del Maestro Koichi Tohei de la Sociedad del Ki?
Sí, Tohei Sensei es muy bueno. Es pequeño pero muy poderoso. Lo vi aceptar un reto de un luchador de una vez.
¿Sumotori o estilo occidental?
Estilo occidental. Dos hermanos (creo que alemanes que vivían en Argentina), ¡y eran enormes! Tenían que agacharse para evitar golpear la cabeza contra el poste de la entrada del Hombu. Esta fue la única vez que O Sensei aceptó un reto en el Hombu. Estas personas viajaban por todo el mundo con un equipo de filmación y desafiaban a diferentes maestros de Artes Marciales. Habían estado en el Kodokan, pero los practicantes de Judo no habían sido capaces de manejarlos. Así que desafiaron al Hombu Dojo del Aikido. Cuando llegaron los recibí y les hice entrar. En el interior del dojo estaban O Sensei, Kisshomaru Sensei, y Tohei Sensei, que era entonces el principal instructor del Hombu Dojo. O Sensei designó a Tohei para ir el primero, dado que él era tan fuerte. El luchador se agachó en una postura baja con sus manos estiradas frente a él, y solamente se movía en un círculo alrededor de Tohei Sensei, durante mucho tiempo. Tohei Sensei estaba muy relajado y simplemente seguía su movimiento, y, finalmente, lo arrinconó. En el momento en el que el luchador comenzó a moverse Tohei saltó sobre él, lo tiró al suelo y llevó su cabeza hacia su cuerpo. Tohei Sensei luego lo inmovilizó con su extensión de la tegatana que, como usted puede haber oído, era muy poderosa. Este tipo no podía moverse, y su hermano se negó a medirse con Tohei, por lo que todo terminó ahí. Al parecer, en el Kodokan Judo los judokas les aconsejaron no hacerle un agarre a un maestro de Aikido. Es por eso que anduvo en círculos alrededor de Tohei Sensei durante tanto tiempo.
Con amigos así ¿¡quién necesita enemigos!? Como estamos hablando de retos ¿te importaría hablarme sobre su confrontación con el Sr. Wang, el Maestro de Tai Chi de China?
¿Quién te habló de esto, Cottier, tal vez?
Quizás sería mejor que no lo dijese.
(Risas) ¡muy bien entonces!. Yo estaba en una gran demostración de artes marciales en Tokio a principios de 1960, y Wang estaba demostrando algo de Tai Chi. Era de Taiwán, y era muy grande, por cierto. Se hizo muy famoso más tarde en Japón. Bueno, al final de su demostración tenía a una serie de Karateka en línea enfrente, y cada uno de ellos le dió un puñetazo en el vientre. No tenía ningún efecto sobre él. No me impresionó. Yo habría hecho otra cosa (Sensei realizó una patada en la ingle y un golpe a la cara mientras decía esto). De todos modos dos de mis estudiantes privados también estudiaban Tai Chi con Wang, y estaban muy impresionados. Me invitaron a venir a verlo. Finalmente acepté y fui a ver a su clase. En el dojo mis alumnos nos presentaron, y él amablemente me pidió que mostrarse algo de Aikido. ¡A pesar de que sus palabras eran cálidas era un desafío! Bueno, nos enfrentamos, y el maestro Wang hizo algo así como la postura de sumo con sus manos extendidas. Me paré y esperé una abertura. Esto se prolongó durante algunos minutos hasta que se adelantó a empujarme. Cuando me di cuenta, hice tai sabaki y agarre su muñeca para hacerle un kote gaeshi, cuando apliqué la técnica hizo un ruido de chasquido fuerte. A pesar de que apliqué kote gaeshi fuertemente y estaba lesionado, no cayó. El maestro Wang zafó su muñeca, y me desafió inmediatamente. Así que esta vez me empujó con ambas manos en el vientre, y me tiró a bastante distancia por la habitación. Aterricé, pero tampoco me vine abajo. Fue una proyección increíble. Mis estudiantes se interpusieron entre nosotros, y eso fue todo.
¿Cómo acabaste siendo enviado a Inglaterra?
Bueno en 1964, cuando se celebraron los Juegos Olímpicos de Tokio, el famoso maestro de Judo, Kenshiro Abbe Sensei llegó al Hombu para presentar sus respetos a O Sensei. Pidió a O Sensei enviar un instructor joven y que estuviese animado a ir a Inglaterra para desarrollar el Aikido con el Consejo Británico de Judo. Yo tenía que ir a Nueva York para asistir a Yamada Sensei, pero O ‘Sensei accedió enviarme a Inglaterra.
¿Por qué eligió la zona Noreste en primer lugar?
Mi padrino, el señor Logan, era un hombre de negocios en Newcastle, así que fui a esa área. Sin embargo, durante mi viaje desde Japón algo pasó con el BJC y no quisieron trabajar conmigo. Así que el Sr. Logan tuvo que pagar mi sueldo, fue un momento difícil. Fue en el noreste que promoví mis primeros grados dan británicos, Pat Butler, Fred Jenkins y Ron Myers.
Sí Sensei, entrené con estos tres hombres durante varios años, sobre todo con Ron Myers. En su viaje desde Japón creo que hubo un incidente, ¿no es así?
Ah, sí, tuvimos una fiesta en el barco cuando cruzamos el Ecuador, y me pidieron una demostración. Yo estaba de acuerdo, sin embargo no había nadie a bordo con experiencia alguna en Aikido para actuar como mi uke.
O si lo hubiera, ¡se mantenía muy callado al respecto!
(Risas) Sí, tal vez. Así que a uno de los tripulantes del buque se le pidió que me ayudara, y que me atacase con un cuchillo. En el Hombu Dojo, en el trabajo de cuchillo, hacíamos un ataque único con tanto. Pero este hombre se agachó, moviéndose a mi alrededor cambiando el cuchillo de mano en mano. Esto era difícil, ya que cuando hizo su ataque no sabía qué mano había cogido el arma. Así que cuando vino hacia mí hice gedan barai con los dos brazos, y fui capaz de desviar su ataque. La punta del cuchillo en realidad pasó por mi obi (cinturón) y apenas tocó mi carne. De gedan barai cambié a una contratécnica y rompí su brazo.
¿Con qué técnica?
Katekatame, creo.
Técnicas de bloqueo como gedan barai no son habituales en el Aikido. Principalmente se utiliza la tegatana para desviar.
Sí, pero no siempre es posible hacerlo por lo que creo que se tiene que ser capaz de hacer un bloqueo fuerte cuando sea necesario.
¿Puede recordar su último encuentro con O Sensei antes de salir para Inglaterra?
Mi hermano y yo viajamos en taxi al Hombu Dojo antes de ir a mi barco. Íbamos muy retrasados por el tráfico de Tokio, y llegaba tarde al Hombu. Esto era muy malo, ya que los uchideshi debían estar siempre listos para recibir y atender a su maestro. De todos modos cuando llegué O Sensei me estaba esperando, y le dije lo feliz que era de que hubiese venido para decirle adiós. Mi profesor me ofreció té, y dijo que le había cuidado bien durante varios años, y me deseó buena suerte. También dijo que no me preocupara por él, y que iba a vivir hasta los 126 años de edad.
¿Estaba O Sensei bromeando contigo?
No, estaba muy serio. Él me había dado un Koan (un acertijo Zen) y sólo ahora lo entiendo.
Sensei, en 1976 regresó a Japón. En realidad, yo fui el último Shodan promovido antes de que volviese.
Sí, ¡por eso me volví a casa! (Risas)
¿Cómo eran las cosas en el Hombu a su vuelta?
Bueno, el estilo estándar del Aikido estaba bien, por supuesto, pero Japón había cambiado en exceso y no me gustó lo que había pasado. Me dieron el trabajo de secretario internacional en el Hombu Dojo y no estaba contento con él. Trabajaba de administrativo todo el día, y no había tiempo para entrenar, esto no era bueno para mí. Soy un artista marcial, no un oficinista. Así que dejé Tokio y me fui a vivir al campo. Me hice granjero y practiqué Zazen (meditación sentada) durante un tiempo. Más tarde fui invitado a trasladarme a San Diego por la Federación de Aikido de Estados Unidos.
¿Puedo preguntarle acerca de su formación en Iaido?
Me gusta mucho el Iaido. Realmente me gusta manejar la katana y siento una afinidad por la espada japonesa. Practico Muso Shinden Ryu, que fue fundada por Nakayama Sensei Hakudo en el cambio de siglo. O Sensei siempre tenía una muy buena relación con Hakudo. Sus estudiantes solían practicar en el Kobukan.
Eso es lo que el Hombu Dojo solía recomendar.
Sí, esto es correcto. Había un buen intercambio de estudiantes. En realidad un estudiante veterano de Hakudo Sensei estaba casado con la hija de O Sensei. Fue también campeón del All Japan Kendo [Nota del Traductor: Seguramente Chiba se refiere a Nakakura Kiyoshi, que fue yerno de O Sensei antes de la guerra, y un famoso kendoka]
Siempre me pareció que había una buena concentración en el Iaido, casi un Zen en movimiento.
Sí, en efecto, este es un buen punto. Es bueno para desarrollar Zanshin. Siempre combino zazen con Iai en mi Dojo. Tal vez 20 minutos de meditación sentada y luego 10 minutos de espada, y luego de vuelta a Zazen.
Me han dicho que ahora escucha música de fondo durante Zazen en el Dojo ¿Es esto cierto?
Bueno, no siempre. Mi Maestro Zen solía hacer eso, ya sea con Bach o Beethoven, y se sentaba. Muy agradable. Se puede ir muy profundo en meditación en tales sesiones, dependiendo del tipo de música, por supuesto: no creo que el jazz sirviese, por ejemplo. Mi dojo está en una calle principal en San Diego, por lo que la música de fondo ayuda a cortar el sonido del exterior.
Durante los últimos veinte años he tenido el placer de entrenar bajo un número de estudiantes personales de O Sensei (además de usted mismo, por supuesto) como Sekiya, Tamura, Kanai, y son todos tan diferentes… ¿Te gustaría hacer un comentario sobre este punto?
Bueno, creo que el Aikido es mucho más amplio que otras artes marciales. El Aikido permite a todos a entrenar juntos. La comunicación que se lleva a cabo en el tatami es sólo una parte de esto.
¿Crees que cada uno de vosotros expresas una faceta diferente del Aikido de O Sensei en su práctica individual?
Sí, creo que eso es así.
Algunas personas dicen que O Sensei era un viejo muy gentil y amable. Sin embargo, otros hablan de su actitud directa y seria, ¿Cuál es la correcta?
Creo que era muy natural para él ser muy amable, gentil y pacífico con los estudiantes ordinarios, pero con los uchideshi era duro y severo a veces.
¿Por qué enfatiza el entrenamiento con armas en su Aikido?
El Aikido se basa en el manejo de la espada tradicional de Japón. Así que el Aikido es el arte del cuerpo en el que nos movemos como un espadachín sin tener una espada. Las armas son particularmente importantes para el entrenamiento ofensivo, o por parejas, como el randori en Judo y el jiyu kumite en el Karate. Nos ayuda a desarrollar el espíritu marcial y otros aspectos como el timing, la distancia, el saber centrarse, etc. También podemos estudiar directamente la técnica básica con los cortes de bokken, además de la extensión del poder de la respiración, el uso de las caderas, etc.
¿Puedo preguntar un poco sobre la historia de Aikido? O Sensei vez fue invitado a enseñar en el Kodokan por el fundador del Judo, el Dr. Jigoro Kano ¿aceptó la invitación?
En ese momento de Kano Sensei estaba tratando de consolidar las artes marciales tradicionales de Japón, para ayudar a su conservación. Por eso le pidió a O Sensei venir al Kodokan para enseñar. Pero O Sensei se negó: sintió que el Aikido y el Judo eran tan diferentes que no debían ser clasificados juntos. Así que en su lugar Kano envió a tres de sus principales alumnos para estudiar con O Sensei: el Maestro Mochizuki y el maestro Murashige, y otro. No puedo recordar su nombre. Estudiaron con O Sensei pero volvían cada cierto tiempo al Kodokan para reunirse con Kano.
¿Fue Tomiki Sensei el otro maestro?
No. Tomiki Sensei vino después. Combinó Aikido y Judo: usaba Aikido para la distancia abierta en combate y judo para un Ma’ai cerrado. Yo no estoy de acuerdo del todo con esta idea, pero Tomiki Sensei era un muy buen artista marcial, y un verdadero caballero.
¡Leí en alguna parte que hay un sobrino de O Sensei, él mismo un artista marcial, que sigue vivo en Japón!
Sí, es el maestro Hogen Inoue. Su parecido con O Sensei es increíble. Él es, por supuesto, muy viejo, pero su Aikido era sólo superado por O Sensei en su momento. Llama a su forma de Budo «Taiwa Shindo» [Nota del Traductor, se refiere al Shin’ei Taido, del que ya os hemos hablado en Aikido en Línea]
El maestro de Karate shotokai, profesor de Harada Sensei, Shigeru Egami fue estudiante de Inoue Sensei. He oído decir que hubo un interesante encuentro entre estos dos grandes maestros.
Debes preguntar a Harada Sensei sobre este tema. Harada Sensei y yo somos buenos amigos: es un intelectual y un gran Maestro de Karate.
Aparte de sus enfrentamientos en el barco, y contra el maestro Wang ¿alguna vez ha tenido que utilizar tu capacidad fuera del dojo?
Bueno un gángster me atacó con un cuchillo una vez en Japón. Él se abalanzó sobre mi vientre, así que le bloqueé con gedan barai, y le rompí el brazo con kata katamae.
En otra ocasión yo estaba en París con Noro Sensei, y visitamos juntos un club nocturno. Yo estaba tomando una copa en una habitación y Noro Sensei estaba sentado en otra habitación jugando a las cartas, o algo así. De repente hubo una terrible confusión dónde estaba Noro, así que fui a ver lo que estaba sucediendo. Era una pelea. Un viejo caballero estaba tendido en el suelo y un joven le estaba pateando. Fue terrible, había una gran cantidad de sangre en el suelo. Creo que lo habría matado, por lo Noro Sensei me dijo: «Chiba, echa a este tipo fuera.» Él no quería involucrarse. (Risas). Agarré a este hombre, y detuve su ataque, le pregunté qué pensaba que estaba haciendo. Él me habló en francés, por lo que ninguno de nosotros entendió lo que decía, así que le empujé fuera. Entonces sucedió algo. Mi cuerpo reaccionó y le proyectó con O Soto Gari, la técnica de Judo. Cayó al suelo muy duramente y oí un ruido de metal. Fue entonces cuando me di cuenta de que había sacado un cuchillo. Mi conciencia había sido tal que reaccioné a la situación con mi subconsciente. Este tipo era un gángster de la Pigalle, y que por eso nadie le detuvo. Era muy conocido al parecer, ¡pero no para mí! No me importaba quién era.
¿Desea añadir alguna otra cosa Sensei?
Cuando regresé a Japón desde Inglaterra, en 1978, un hombre nos retó. Pero el Hombu Dojo se negó, a pesar de su persistencia.
¿Era un Karateka?
Nadie sabía lo que hacía. Como ya he dicho era persistente y cada pocas semanas volvía a desafiarnos. Cada vez tenía que explicarle que no podíamos aceptar. Creo que el hombre no estaba bien de la cabeza. De todos modos, con el tiempo yo personalmente me cansé y acepté su reto. Nos organizamos para quedar y solucionar el problema. Insistí en que estuviésemos de acuerdo para no presentar cargos en caso de lesiones graves e intercambiamos cartas a tal efecto. Le dije como profesor de artes marciales que estaba dispuesto a morir si era necesario. Bueno, quedamos y yo empecé atacando, avanzando directamente hacia él y le golpeé primero. Le lancé contra la pared y cuando llegué hacia él saltó sobre mí, era como un tigre. Entonces le rematé con nikkyo. Estaba cansado de todo aquello. Había mucha sangre y estaba en el suelo gritando. Ese fue el último desafío que nos lanzó, parece que no esperaba que un aikidoka iniciase un ataque.
Para concluir nuestra charla me gustaría saber su opinión acerca de dos cosas separadas: atemi y la competición en el Aikido.
Bueno, yo creo que el atemi es muy importante para las técnicas de Aikido. Generalmente no se enseña en clase, pero yo personalmente entreno atemi, por supuesto. No hay competición en Aikido porque expulsaría a una gran cantidad de personas del entrenamiento. El propósito del Aikido es permitir a tantas personas como sea posible (hombres y mujeres, jóvenes y viejos, débiles y fuertes) desarrollar su potencial a través de la práctica conjunta.
¿Qué considera usted que es la cualidad más importante de un buen Aikidoka?
Sinceridad.
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